EL ROEDOR-Leonel-Danilo; dignidad y decencia

Aristófanes Urbáez
elroedor2045@hotmail.com

“Leonel es como el sándalo, que perfuma el hacha que lo hiere”.- –Manuel Fermín Diloné–

Lo primero, antes de desarrollar lo que voy a decir, es que este escribano es absolutamente consciente de que todos los dominicanos en edad adulta tienen el derecho humano esencial de tener un empleo, un trabajo remunerado acorde con sus capacidades; y lo segundo: que pese a que he hecho el compromiso sagrado decir la verdad y desprecio la mediocridad y la falsía, no hay un solo periodista que diga que perdió su empleo por un chisme o “chivateo” de quien escribe, sino que al contrario, he peleado con todos mis directores cuando traté de defender a algún coleguita despedido por alguna falta mínima, debido a que la mayoría de los ejecutivos de medios, ni soportan que les digan la verdad y se vuelven “Munditos” (locos con el mandito), olvidándose de las crujías y sudores que cogieron cuando eran redactores; o si no, caen en paracaídas por “mancuernas” con los dueños y accionistas sin haber sido redactores, subalternos, ni quemado etapas.

Y quiero consignar que el “pleno empleo” –en la democracia, que es el mejor sistema de gobierno, hasta ahora–, ningún gobierno del mundo lo ha logrado, a tal extremo que EEUU, que es el ejemplo, epítome, paradigma, de democracia, tiene hoy más de 50 millones de ciudadanos sin Medicaid; 37 millones recibiendo ayuda social (fundas de alimentos, como el “Plan Social de la Presidencia” de Leonel y Emigdio Sosa), y un 9.3% de desempleo. Apenas anteayer el Teniente General Vladimir Putin, hombre fuerte de Rusia y Primer Ministro, decía que EEUU vive de una “economía parásita, comprándoles bonos impagables a las demás economías del mundo”.

Por eso, al menos, me sorprende e indigna que gente que como el trotamundos de A. Montaner –que cuando “apretó” en España, se instaló en Miami–, hable de la “perversidad ideológica” de Chávez (que no ha matado a nadie y con la advertencia Venezuela no será jamás la misma después del Tte. Coronel); pero se calla el genocidio de la OTAN (“la cosa” Berlusconi, Obama, Cameron y Sarkozy, en Libia); o la ideología sionista del 1x10 o “el ojo por ojo y diente por diente”, propia de los bárbaros. Y lo dice quien siente “puro asco” por todos los terroristas del mundo, sean cualquier signo ideológico o bandera religiosa con que se cubran. Si el mundo está como está se debe a esta falta de escrúpulos y equilibro que sólo ve, eructa, inyecta y eyecta, una sola taza de la balanza. ¡No hay justicia fuera del equilibro!

2.- El odio, arma mortalCualquiera puede pensar que el odio es propio de la actividad política, y esa conclusión errada se ve más en los países débiles institucionalmente donde, como dice Balaguer en sus “Memorias de un cortesano de la Era Trujillo”, esta actividad se limita al “quítate tú para ponerme yo”; pero el odio es una patología tan vieja como la humanidad. Siendo un jovencito, caminaba por la calle Mella de Vicente Noble, y alguien voceó que Zutano de tal sufrió un accidente preparando “triculí” (alcohol criollo de agua, azúcar y levadura fermentada, que se ‘refina’ atizando un tanque grande con candela y un tuvo metálico de estufa que se hunde en ‘regola’, cuyas gotas –filtradas– caen en una lata al otro extremo). La tapa del tanque lo había matado. Un señor –cuyo nombre me reservo por razones éticas y porque ya falleció–, murmuró a mi lado: “¡Ya me la pagó!”. El muerto le había dado una pedrada en un pleito.

El odio es una patología y obedece a los instintos más primitivos. Como no soy farsante, me duelen los dominicanos que mueren en caravanas políticas y jamás doy el pésame a un deudo si no sentía aprecio por el muerto.

3.- ¿Por qué tanto odio?
He sostenido y sostengo la tesis de que este gobierno –y otros gobiernos–, mantienen una oposición que parece rabiosa de pose. ¡Oh, Dios, si los cuadernos y libretas de los contratistas y los compadritos del narco, como las de Figueroa A., pudieran hablar! El señor JBD (“La culebra barbuda”), es un oficiante del odio, un cultor de esta “cultura” y lo grande es que infecta a todo el que se le acerca. No entiendo cómo alguien puede entrevistar a una persona a la que odie. El que no se respeta a sí mismo, decía don Juan, no respeta a nadie. Ahora dicen los “análisis” del señor de marras que “Leonel traspasará la carga muerta de su impopularidad a Danilo”. ¿Cuál? Ningún candidato puede hacer lo que promete.

Ejemplo: Obama. Este sembrador de saña y cizaña, antes decía otras cosas: de Margarita, de Danilo, de Leonel. Las peores lacras de nuestra sociedad son la corrupción y el narcotráfico, que genera la violencia. La corrupción es de Leonel, pero el “narco”, ¡también pretende endosárselo! ¿Y de qué objetividad es que habla? ¿Cuáles son los argumentos históricos de sus supuestos “análisis”, el que se precia de culto? La politiquería, las coimas, el ‘prebendalismo’, las canonjías, son una “cultura”, y ni sociedades milenarias y avanzadas han podido librarse de los tabúes y el fetichismo que entraña un “complejo cultural”. Dice el historiador César Herrera Cabral, que B. Báez, tomó un préstamo para financiar una campaña. Y en la actualidad, presidentes han hecho lo mismo. ¿Porqué “cargarle” a un Presidente conciliador, concertador, manso, bueno, que no insulta, las 10 plagas de Egipto, sobre todo alguien que se considera conocedor del entorno internacional? Si esa es tu actitud, tu integridad, tu dignidad; entonces, retira a tu cónyuge del banco del Estado –que ella cabe en cualquier otro privado por sus calidades–, donde recibió una millonada en diciembre por los dividendos. Y tal como dije arriba, ella tiene derecho al trabajo, pero no a ser una “privilegiada” del régimen más corrupto y del Presidente peor de nuestra historia.

“Las causas marcan”, decía Lincoln. ¿Y dónde está el sentido elemental de la decencia, mi santa y vieja Empera?